Aprovecha el servicio de taxi acuático que ofrece el hotel. es una experiencia única y te permite explorar la ciudad desde otra perspectiva.

El lugar perfecto para amantes de la historia

La decoración es única, como si estuvieras dentro de una película. Los cócteles en el bar son increíblemente buenos, y el personal siempre tenía una sonrisa lista. A pesar de no ser un lugar barato, realmente vale lo que pagas por la experiencia que ofrece.

No es económico, pero puedes disfrutar de la experiencia.

la habitación era enorme y estaba perfectamente decorada, lo que lo hizo ideal para disfrutar con mi pareja. además, el ambiente en el bar-restaurante era acogedor y divertido, perfecto para relajarnos después de explorar la ciudad.

el servicio en el restaurante fue un poco lento.

La decoración artística y los toques históricos en el interior del hotel son impresionantes.

El acceso a algunas áreas del hotel podría ser complicado para personas con movilidad reducida.

Vistas impresionantes y habitaciones espaciosas.

el restaurante ofrece cócteles deliciosos y servicio muy amable. la conexión de thewi-fi es un poco inestable.

El ambiente es súper relajante, con un bar acogedor y su increíble terraza donde disfruté de unos deliciosos cócteles. Además, puedes relajarte en el patio o explorar el restaurante que tiene un menú variado y rico. Solo que el acceso al aparcamiento puede ser un poco complicado a horas pico, pero vale la pena. 😄

una aventura nostálgica en un hotel lleno de historia y un bar muy acogedor con excelentes cócteles

La decoración es única, con un ambiente retro que te transporta a otra época. Un bar acogedor, ideal para disfrutar de cócteles, y un personal excepcionalmente amable. Recomiendo explorar la ciudad en taxi acuático. Un lugar mágico.

definitivamente regresaría

Me alojé en una Maaszijde Deluxe Room. Era enorme y estaba divinamente decorada. Tenía aire acondicionado, baño privado con ducha, y todas las comodidades como TV de pantalla plana, cafetera, y caja de seguridad. El bar-restaurante es acogedor, perfecto para cócteles. El patio tiene una vista espectacular del puerto, ideal para relajarse después de un día explorando.

super recomendado for una pequeña escapada

Habitación amplia, ambiente acogedor, el bar-restaurante tiene una gran variedad de deliciosos cócteles y un excelente servicio, además de ser muy conveniente estar a pasos de la estación de metro Wilhelminaplein, facilitando la exploración de la ciudad.

De verdad no hay nada que no me haya gustado.

El hotel está situado en un lugar excelente rodeado de agua, lo que me permitió disfrutar de vistas impresionantes desde mi habitación. Me alojé en una Maaszijde Deluxe Room, con techos altos y decoración bien cuidada. El bar-restaurante era acogedor, tanto dentro como en la terraza, ideal para disfrutar de cócteles. Sin embargo, el acceso al aparcamiento fue un poco complicado, especialmente durante las horas pico, lo que resultó en ciertos inconvenientes. Además, noté que el mobiliario antiguo necesitaba un poco más de atención. La calidad de los amenities era buena, pero esperaba un poco más considerando el precio de la habitación. La atención fue eficiente, aunque hubo momentos en que la espera en el restaurante fue un poco más larga de lo que hubiera querido. En general, la experiencia fue agradable, pero hay detalles que podrían mejorar.

La habitación fue enorme y divinamente decorada, con amenities de excelente calidad. La terraza con vistas al río es el lugar perfecto para relajarte con un aperitivo mientras contemplas una escultura que rinde homenaje a los antiguos puertos.

El acceso a algunas áreas del hotel puede ser un poco complicado, lo que podría ser un inconveniente para quienes buscan comodidad total. Aunque la decoración histórica es fascinante, no todos pueden sentirse cómodos con ese estilo que recuerda a un crucero de mediados del siglo pasado. Además, el aparcamiento puede ser un desafío durante horas pico, lo que puede causar un poco de frustración.